Los arqueólogos del futuro van a encontrarse algún día con los vestigios de esta civilización y así como hoy nos asombramos de los grafismos de la cultura egipcia y los expertos tratan de descifrarnos sus enigmáticos mensajes gráficos, los arqueólogos del año 3000 interpretarán de alguna manera esos grafismos de comienzos del siglo XXI donde caritas con expresiones básicas de la psicología humana e iconos de actividades y objetos cotidianos dominan nuestras comunicaciones.
¿Como podíamos vivir sin los emojis antes? Muchos de ellos dicen cosas que sería largo decirlas con palabras. Como podríamos expresar nuestro asombro con palabras tan bien como lo hace con total precisión la carita de los ojos desorbitados, o la carita con corazones en los ojos y para buscar emociones menos positivas, la cara de enojo o la cara vomitando ya cuando es algo desagradable. ¿Cuándo podíamos imaginarnos que un mensaje con contenido sexual se representaba con un durazno o con una berenjena? Antes no existía la circunstancia de que alguien nos ofendiera poniendo un emoji de una carcajada como opinión a nuestros comentarios.
Pero cuando ya estábamos acostumbrándonos a los emojis, aparecen los gifs y ahí sí que el vocabulario se enriqueció aún más. No sé cómo pudimos comunicarnos antes. Trozos de películas, videos cortos o imágenes locas convertidas al formato de gif se convierten en la mejor respuesta a un mensaje de texto que nos llega. Demostrar asombro, demostrar vergüenza, aparentar carcajadas o gestos para expresar que tratas de decirme, quedan resumidos en geniales gifs que nos demuestran que seria imposible reemplazarlo con textos o palabras.
(Quien escribe esto es una persona de edad madura y trata en lo posible de escribir mensajes de texto bien redactados con tildes y buena redacción para que quien lo reciba entienda de verdad la intención y responda adecuadamente). Con mis hijos millennials no tenemos mensajes de texto largos a menos que sea la lista del mercado y me sorprendo cuando me responden categóricamente con un gif oportuno que resume todo. También tengo una amiga con quien nos escribimos a menudo y ella tiene dificultades para enviarme textos con ideas concretas. Me envía varios mensajes cortos para completar el asunto y algunas veces sin contexto. Pero cuando está feliz me envía un emoji de una tacita de te sonriendo, si está muy feliz y agradecida me envía el gif de una niña que reparte besos saltando y cuando esta frustrada me envía un gif de Diego Maradona con cara de desespero.
Estas nuevas formas de comunicarnos ocurren gracias a los avances en los teléfonos celulares y al trabajo de creativos locos que nos regalan estos gifs que cambiaron la forma de entendernos. También es una muestra de la importancia de las imágenes como lenguaje de comunicación en esta época del siglo XXI. Pero con toda seguridad le darán mucho que hablar a los arqueólogos del año 3000.
Nota: Para curiosos y creativos, existen apps donde podemos elaborar nuestros propios gifs y así pasar a la historia enriqueciendo este lenguaje universal. Ejemplos: giphy, ezgif, gigmaker y muchas más. 😊


